viernes, 15 de noviembre de 2013

CASO CLÍNICO NUX VOMICA. Dra. Nancy Martinez

Hombre de 54 años, con ocupación técnico

MOTIVO DE CONSULTA Y ENFERMEDAD ACTUAL:

Nux vomica

Desde hace 35 años posterior a la ingesta de cantidad abundante de carne de cerdo, en buen estado, dolor tipo ardor en el epigastrio, inicialmente ocasional hoy en día de forma continua, que no se modifica con el ayuno  ni la ingesta de comidas, no se modifica con las bebidas, ni con el calor ni con el frío, no varía en ninguna posición, se asocia a la sensación de tener el abdomen en su totalidad distendido. agrieras, las cuales aparecen especialmente después de la ingesta de grasas. Aún acabando de comer y estando lleno, bostezos como cuando se tiene hambre o sueño frecuentes que mejoran al tomar un sorbo de agua al clima. De manera episódica, deposiciones acuosas, lientéricas, explosivas, fétidas escasas o abundantes que aparecen y desaparecen espontáneamente, sin que se relacionan con ningún evento en especial.


En la revisión por sistemas refiere además, disminución de la agudeza visual de cerca, aumento de la frecuencia urinaria a 4 veces en la noche 5 en el día, disminución en el calibre del chorro urinario y pujo miccional. refiere además dolor en región lumbosacro posterior a los esfuerzos físicos y sensación de adormecimiento y dolor en la cara posterior del miembro inferior izquierdo.

Apetito variable por temor a enfermar al comer la mayoría de los alimentos 
Sed de pequeñas cantidades
Deseos de alimentos bien condimentados, picantes, pescado. sin aversiones alimenticias.
Duerme de medio lado en general bien, sueño reparador, episodios anteriores de insomnio especialmente cuando tenia problemas laborales.
tendencia a ser friolento por lo cual gusta mucho de clima cálido.
no transpira
No tiene horario de agravación específico, no hace ejercicio.

Antecedentes de Amigdalectomía a los 37 años, ex fumador pesado desde hace 10 años, bebedor de café 4 tazas diarias y de bebidas alcohólicas hasta hace 10 años cada 8 días hasta la embriaguez. madre con diabetes Mellitas.

Mentales
En la exploración de su esfera mental se observa un paciente excesivamente locuaz al relatar lo concerniente a su enfermedad al punto de no permitir en muchas ocasiones siquiera la intervención del médico. ofrece excusas todo el tiempo. El único desencadenante que identifica de su enfermedad fue el descrito en la enfermedad actual, en cuanto a su caracteriología se describe como un individuo impaciente, colérico, hasta el punto de llegar a agredir fisicamente, cara roja con la cólera. Sus cóleras aparecen y desaparecen rapidamente. se describe como explosivo. lo que más le molesta es la impuntualidad, las injusticias, los malos tratos. Es capaz de decir lo que piensa a quien sea. le preocupa su salud, lo que sucederá en el futuro, en especial el de sus hijos, teme enfermar y no poder seguir ayudándolos. Es afectuoso y muy celoso.

Al examen físico se encuentra de positivo dolor a la palpación profunda de la totalidad del abdomen, Lasegue positivo izquierdo.

Tras repertorización y comparación de la materia médica, se prescribe Nux-vom 0/6 2 gotas al día en una cucharada de agua.

Control
Es visto a los dos meses en control refiriendo una mejoría del 70% de la totalidad de su síntomatología, con un episodio de dolor en epigastrio intenso que cedió espontáneamente, mejoría parcial del dolor lumbar, mejoría total del dolor y adormecimiento del miembro inferior izquierdo. Se deja igual medicación aumentando la frecuencia de la toma a dos veces al día.
es visto nuevamente en control a los 4 meses refiriendo la desaparición de todos sus síntomas y el compromiso de llevar a toda su familia a consulta de Homeopatía.

Tomado de: MATERIA MÉDICA HOMEOPÁTICA - CASOS CLÍNICOS- Fundación instituto Colombiano de Homeopatía Luis G. Páez

DISTINCIÓN ENTRE EL SIMILAR Y EL SIMILLIUM James Tyler Kent

Este, es no de los puntos más dignos de consideración;estamos tratando de hacer una distinción entre el similar y el simillium, con lo cual yo no estoy de acuerdo. No tengo ninguna duda por la experiencia, que dos medicinas pueden ser lo suficientemente similares a la totalidad sintomática y que si cualquiera puede ser el simillium, una debería ser lo suficientemente semejante como para curar, y no puede decirse que ambas sean, o que cualquiera de ellas pueda ser el simillium. Si se va a profundidad se puede considerar esto de este modo: La medicina puede ser tan disimilar que su poder dinámico haga poco o no tener efecto sobre la enfermedad; aquella tiene que aproximarse a ésta en un grado de similitud hasta ser más y más similar. Al aproximarse en similitud, puede sostenerse la incapacidad de cambiar los síntomas existentes, pero puede ser lo suficientemente similar como para viciarlos, para cambiarlos y no efectuar la curación, ni tener mejoría el paciente, sino sólo provocar cambios de los síntomas. he observado esto en el manejo de fiebres intermitentes, más que en cualquier otra clase de trastornos, cuando se dan medicinas que tienen unas pocas características de las intermitencias, pero que no corresponden al genio de la enfermedad o del paciente y se sigue inmediatamente dando sus complementarios; así se cambian éstas de tiempo en tiempo, cada cinco o seis semanas; he visto este proceso en muchos casos. las medicinas pueden ser suficientemente similares como para efectuar resultados curativos en un paciente y mejorar la salud de tal paciente; mejorar su estado general tanto en una enfermedad aguda como crónica. Cuando tal medicina ha hecho todo lo curativo que es capaz de hacer, entonces su complementario seguirá adelante con este trabajo. Este es un hecho de experiencia plenamente establecido por el Organon y por todas las experiencias humanas y me parece que este artículo no llama la atención sobre nada nuevo, porque esto está en relación con todas las experiencias humanas.
Tanto haya psora o miasma agudo, puede haber una medicina lo suficientemente similar como para animar un caso, o lo suficientemente similar como para tener una acción curativa; o sea, ser simillium, que es la medicina que cura los síntomas presentes, erradicándolos completamente.

jueves, 14 de noviembre de 2013

ORGANON DE LA MEDICINA § 27


En constancia, el poder curativo de las medicinas depende de sus síntomas: que sean similares a la enfermedad pero superiores a ella en fuerza (Parágrafos 12-26); así todo caso individual de enfermedad será aniquilado con seguridad y rapidez máximas y eliminado radical y permanentemente tan sólo por aquella medicina capaz de producir (en el sistema humano), del modo más similar y completo, a la totalidad de sus síntomas y simultáneamente que éstos sean más fuertes que dicha enfermedad.